Hace unos días desde una Escuela de Coaching, concretamente Olacoach, se organizó una convocatoria para llevar a cabo un día solidario...como siempre lo ví pero no me apunté, ni hice nada al respecto!(Cosa de la que no me siento especialmente satisfecha, por supuesto).
Hoy leyendo los comentarios de las personas que habían acudido a esta jornada y de lo felices que estaban me he acordado de una experiencia que viví hace años y que me gustaría compartir con vosotros.
Hace ya algunos años justo antes de navidades se organizó una excursión desde un colegio, en el que participaba, y que consistía en llevar unos dulces a una residencia de ancianos y pasar la tarde con ellos cantando villancicos...fue impresionante! Sólo con rememorar esa tarde me emociono. No os podéis imaginar lo felices que fueron tanto ancianos como niños. Fué una concentración de amor y de bondad tan natural y tan grande que jamás había visto nada igual...allí estaban compartiendo tiempo, canciones, dulces, pero lo más importante, estaban compartiendo cariño y amor sin esperar nada a cambio, sólo ese ratito. Es realmente impresionante como se puede dar tanto amor en tan poco tiempo y con qué poquito se puede hacer feliz a tanta gente a la vez!
Me imagino que como yo otras muchas personas habéis podido constatar esta realidad, entonces:
¿Porqué lo praticamos tan poco y tan mal? Nos cuesta mucho dedicar una tarde a los demás? es realmente imposible hacer este tipo de acciones antes y depués de Navidad? que ocurre cuando llega Navidad, sacamos lo mejor de nosotros mismos? y el resto del año donde está esa parte tan hermosa y grandiosa de nosotros mismos? tapada bajo la "herradura oxidada" quizás?
Sólo con rememorar esa tarde mi corazón, por un lado, se encoje de pena por no haberlo hecho más a menudo y, por otro lado, se reconforta, al sentir de nuevo la felicidad que en esa tarde se respiró y vivió en esa residencia.
Ahora ya no estoy en ese colegio pero eso no es excusa ...ya ha pasado mucho tiempo desde que experimenté esa sensación y quiero que los demás también la vivan. Este puede ser un buen momento para organizar alguna acción solidaria. Os mantendré informados por si os queréis sumar.
No te rías de lo sueños de los demás quien no tiene sueños no tiene gran cosa en la vida.
Ama en plenitud, puedes salir lastimado pero es la única forma de vivir plenamente.
Yo me quedo con la dos, ¿con cuál te quedas tú?
Alicia Alberola.
Co-active coach.